Despidos: ATE bloqueó esta mañana los dos portones de Dioxitek

(www.AteCordoba.org – Córdoba) "Estamos en un proceso de disputa en la puja distributiva en una forma que tiene alta rentabilidad y en ese marco, estos despidos son injustos y arbitrarios, se producen en un contexto social y económico difícil", remarcó.

Como resultado del plan de lucha de ATE en el sector nuclear para lograr la reincorporación de dos trabajadores despidos en julio pasado en la planta de Dioxitek, y ante la falta de canales de diálogo que, para reconducir la situación, esta mañana a las 7AM ATE Córdoba realizó el bloqueo de dos portones de la fábrica de Alta Córdoba, paralizando cualquier ingreso y egreso de materiales en el lugar.

Javier Giordano, con 15 años de antigüedad, planta permanente, sin sumario ni causa, quien está por ser papá, y de Franco Rojas, despedido por el macrismo en FADEA y ahora de Dioxitek, con un año de antigüedad y un contrato a plazo fijo que vence a mediados de agosto, fueron despidos de manera arbitraria e injustificada, generando la amplia reacción de todo el sector nuclear de distintos puntos de país.

Por eso la Mesa Nuclear de ATE Nacional se hizo hoy presente en Córdoba para apoyar la medida de fuerza y dar muestras que todo el sector nuclear está movilizado y dispuesto a llevar adelante la lucha para revertir los despidos, tal como lo demostró a principios de agosto, cuando se realizó una fuerte protesta en la sede de CNEA en Capital Federal.

“Exigimos a la empresa que revea esta situación y reincorpore a los trabajadores despedidos. Llamamos al diálogo reflexivo. Mientras estamos manteniendo una paritaria donde reclamamos un aumento para que mejoren los sueldos y por eso toman represalias contra ATE. Instalan el miedo y no respetan nuestros derechos como trabajadores”, denunció el delegado de ATE Oscar Torres, en el marco de la protesta.

La ruidosa movilización incluyó quema de cubiertas y cánticos dirigidos a los directivos de Dioxitek que realizan una política persecutoria contra ATE, tal como lo denunció el secretario General de ATE Córdoba, Federico Giuliani, frente a los medios de prensa presentes en el lugar.

“Los dos despidos fueron un castigo a la lucha de ATE en esta planta estatal”, dijo Giuliani.

“Estamos en un proceso de disputa en la puja distributiva en una forma que tiene alta rentabilidad y en ese marco, los dos despidos son injustos y arbitrarios que se producen en un contexto social y económico difícil. Es la segunda acción que llevamos adelante después de la toma de la cede de CNEA en Capital Federal. Hoy bloqueamos dos portones de la fábrica para ponerle en agenda a los directivos que hay que sentarse a dialogar y reincorporar a los compañeros de manera inmediata. O que en su defecto el Ministerio de Trabajo de la Nación actúe con alguna perspectiva de conciliación obligatoria para poder tener una instancia de diálogo”, declaró el dirigente.

Y agregó: “dentro de la fábrica hay mucho miedo por la persecución política por parte de Gómez, que es el gerente de la planta de Alta córdoba de Dioxitek, con amedrentamientos y prácticas desleales antisindicales. Por eso es importante que los compañeros vean que ATE banca la parada y que no nos vamos a correr hasta lograr las reincorporaciones”.

El dirigente apuntó también a una interna en el gobierno nacional que se expresa en la situación de la empresa. “Dioxitek que está siendo dirigida por la provincia de Formosa y los trabajadores quedamos entrampados en esa interna entre Gildo Insfram y otros sectores internos”.

Finalmente, Giuliani remarcó que “vino la Mesa Nuclear de ATE Nacional a respaldar esta medida de protesta. Estamos construyendo la fuerza porque después de las elecciones del domingo pasado sabemos que lo que se viene tendrá esta gimnasia, ante los vaciamientos y el ajuste que se producirá en el Estado lo que nos queda es la fuerza organizada en la calle”.

 

Más voces

Daniel Soracio, trabajador de Planta de Agua Pesada (PIAF) de la provincia de Neuquén, dijo que “somos defensores de la actividad nuclear y no podemos tolerar despidos de compañeros. Estamos en Córdoba para bancar las medidas que sean necesarias para lograr la reincorporación de los despedidos. Sorprende mucho que en un gobierno nacional y popular se produzcan estos hechos”.

En línea con lo dicho por los dirigentes de ATE Córdoba, Soracio señaló que “es una persecución al sindicato, atento que el compañero fue delegado durante mucho tiempo. ATE siempre fue un gremio combativo que pelea por el derecho de los laburantes, mientras otros sindicatos de la actividad están haciendo negociados, pero nuestra política es que si tocan a uno nos tocan a todos. Trabajamos en pos de los derechos de los trabajadores y de la soberanía energética. Hoy sabemos que la energía nuclear será la energía de transición del mundo hacía las energías renovables. Para llegar a eso hay que pasar por la transición de la energía nuclear y en ese marco es lamentable que el país no tenga un proyecto nuclear acabado”.

El dirigente destacó que “estamos reactivando la planta de agua pesada de Neuquén, y queremos reactivar la mina de uranio de Mendoza, que son importantísimas para ese proyecto. Hoy dominamos todo el ciclo de combustible de las centrales nucleares que tenemos, pero en vez de trabajar en eso tenemos que estar detenidos por este conflicto, ya que los despedidos son necesarios para concretar este trabajo”.

Asimismo, Ernesto Simionatto, integrante de la Junta Interna de ATE de la firma Na-sa (Nucleoeléctrica Argentina), y miembro de la Seccional ATE Zarate dijo que “no podemos entender que el gobierno que pregona contra los despidos y la precarización laboral están concretando despidos y lo lamentamos muchísimo, porque además es una persecución de los directivos de Dioxitek hacía nuestra organización”.

Simionatto recalcó que “hay una convivencia con el gremio de técnicos de CONEA que se prestaron a esta maniobra. Llamamos a la reflexión a estos compañeros que se solidaricen con nuestra medida de fuerza, porque lo mismo les puede pasar a ellos, con gran riesgo porque, si no los paramos, estos despidos pueden seguir creciendo. Llamamos a la reflexión también a la política del gobierno, para que dé marcha atrás y reincorpore a nuestros compañeros”.

“En el marco de la plena actividad que estamos desarrollando en el sector estos despidos no tienen ninguna justificación”, dijo el trabajador bonaerense.

“Si debemos lamentar que se venía hablando de una cuarta central nuclear y eso cayó en saco roto. Apostamos que el gobierno revierta esta postura y se encamine en la construcción de la cuarta central Kandú, lo que justifica aún más la existencia de Dioxitek”, concluyó.